¡Qué gran aliado este del cálculo mental! y ¡qué cuesta arriba se les hace a muchos!
Aprovechando el verano, en la academia estamos trabajando con un grupo de niñas en las que queremos fomentar esa agilidad en el cálculo, y una mejor comprensión de los problemas. Hoy concretamente quería hablaros de una de las actividades que utilizamos para trabajar el cálculo mental por si puede ayudaros.
Está basada totalmente en los algoritmos ABN que tan bien explica su creador, Jaime Martínez Montero, de hecho, es una actividad suya. Otro día hablaré largo y tendido de esta forma de hacer los cálculos, ya que me parece muy interesante.
Lo que nosotros hemos hecho es utilizar los algoritmos ABN, no como único método de cálculo de nuestras alumnas, si no como una herramienta más, para que cojan destrezas a la hora de calcular mentalmente, ¡y vaya si funciona!
Bueno, que me voy por las ramas, la actividad en cuestión. Lo que tenemos es montones de palillos que nos hacen de unidades, es decir, si quiero representar el número 3, cojo 3 palillos. Grupitos de palillos de 10 en 10 unidos por una goma, que representan las decenas, si quiero representar el número 23, cojo dos grupitos de 10 palillos y tres palillos sueltos. Y por último, grupos de palillos también unidos con una goma, pero esta vez en grupos de 100, así, para representar el número 325 tendré que coger, tres grupos de 100, 2 grupos de 10 y 5 unidades sueltas.
La idea es un poco visualizar los números. Cuando a un niño le planteamos que haga mentalmente 452 + 141, sólo de oírlo se bloquea. Estoy hablando de alumnos de primaria. Si le mostramos este material de los palillos, no tiene ningún problema en llevar a cabo la operación. Coge los dos números en palillos y luego los cuenta todos juntos, las unidades con las unidades, las decenas con las decenas y las centenas con las centenas.
El resultado es fácil, lo ven clarísimo, 593. Sólo hay que contar, nada de imaginarse unos números debajo de otros, una línea e ir sumando. Y además contar, como lo haríamos por lógica, las unidades con las unidades, las decenas con las decenas y las centenas con las centenas. Y ahora seguro que os estáis planteando: ¿y si la suma es llevando? Pues ningún problema. Cuando tenga por ejemplo 13 unidades, cojo 10 de ellas les pongo una goma, y ya tengo una decena más, a contar con las decenas.
Sé que así contado suena tentador pero como que necesitáis más datos, ¿verdad? Totalmente de acuerdo. Sólo he pretendido abriros boca de las múltiples opciones que nos brindan los materiales manipulativos. Claro que esto no es trabajo de un día, para que a los niños se les vayan quedando estas cosas hace falta “jugar” mucho, pero lo ven tan sencillo, que merece la pena ponerse a ello.
Y claro, aquí os he contado muy por encima como sería la suma, ¿os imagináis la resta? Seguiremos hablando 😉
Silvia Carrera Sanjuan
Hábitos de Estudio